lunes, 5 de agosto de 2013

Herediano el rival a vencer

El 25 de mayo del 2013 es una fecha que nunca será olvidada por los miles de aficionados rojiamarillos, que vieron como su equipo el Club Sport Herediano se coronó campeón del Torneo de Verano 2013.

En “Una noche mágica”, el Herediano hizo algo que muy pocos equipos han logrado  en Costa Rica, remontar un marcador en contra de 3-1 y lograr convertirlo en un empate de 4 a 4 en el global, haciendo de este resultado  una hazaña que perdurará en la memoria de los aficionados.

Dicho marcador llevó a ambos equipos a los penales, situación que revivía momentos no muy alegres en las memorias de los miles de aficionados heredianos que recordaban como por esta misma situación su equipo perdió en dos ocasiones el campeonato de futbol costarricense y contra un mismo rival Liga Deportiva Alajuelense, pero esta vez no sería igual, y encontrándose con el ultimo penal que podría definir una nueva historia para la escuadra florense, el jugador Minor Diaz, con total tranquilidad  y con  su enorme experiencia en el fútbol, coloco el balón al lado izquierdo del marco que protegía el portero del Cartaginés Luis Torres, siéndole imposible detenerlo, inmediatamente la afición invadió  el terreno de juego con una  euforia inmensa, ¡el tan anhelado título 23 en su propio estadio   se había logrado!.
Semanas después de haber logrado su título, ya los aficionados especulaban acerca de las posibles contrataciones que pudieran hacer su equipo para hacerle frente a los 2 torneos de alta  exigencia que vendrían.

Uno de esos torneos es el de Concacaf Liga de Campeones, un torneo que exige un alto nivel de competitividad y exigencia, por parte de equipos de Centroamérica y del Caribe, por el hecho que a este torneo, asisten clubes  mexicanos y  estadounidenses que siempre han sido unos rivales difíciles de vencer.

Por esta misma situación de encontrarse con clubes superiores, ya sea por sus economías que les permiten tener infraestructuras y condiciones mejores a las de los clubes costarricenses, la nueva administración florense quiere hacerle notar a estos clubes llamados “grandes” que se le puede exigir un alto nivel de juego, y para ello el presidente del Club Sport Herediano y su administración hicieron un esfuerzo por contratar un total de 7 jugadores con una gran profesionalidad y experiencia, que junto a los jugadores que ya se encuentran militando en el Club Sport Herediano puedan hacerle frente a este campeonato al punto de querer coronarse campeón de tan difícil torneo de Concacaf.
  
Por otro lado, en el Campeonato de Invierno 2013, (seria su segundo torneo exigente) el herediano, quiere conformar el mejor equipo de Costa Rica, y la principal fuerza que los motiva es hacerse dueños de este campeonato, y lograrse coronar bicampeones del torneo nacional, una hazaña que no logran desde 1978 y por la cual quieren romper con esa historia.

Muchos jugadores y la misma administración comentan a los medios de comunicación que ellos van por ese ansiado Bicampeonato y que son los favoritos a llevarse este próximo  torneo de invierno 2013.

Los medios de comunicación y distintos jugadores de otros equipos no desmienten esas palabras y  posicionan al Club Sport Herediano como el rival a vencer en este año, expresiones que le dan fuerza a toda la escuadra del herediano y muchas ganas de hacerles vivir una nueva final “mágica” a sus fieles aficionado.

miércoles, 24 de julio de 2013


Parte de pretemporada del Fulham en Costa Rica


Fulham de la Liga Premier de Inglaterra, donde juega el costarricense Bryan Ruiz, visitó Costa Rica como parte de su pretemporada. Jugó 3 partidos y salió victorioso en cada uno. Hecho histórico ya que es el primer equipo inglés que juega en el país.

En el primer partido los británicos  golearon 0-3 al Club Sport Cartaginés. El subcampéon nacional no demostró gran participación al verse derrotado después de dos anotaciones de Dimitar Berbatov y el tercer gol por  parte de Bryan Ruiz después del centro enviado por Hugo Rodallega delantero colombiano.

Al Estadio Nacional asistieron 11 000 aficionados y la recaudación fue de 90 millones, según el vicepresidente Carlos Loría y los dirigentes del club hubo pérdidas ya que esperaban más asistencia.

Para el segundo encuentro el Fulham se enfrentó a la Liga Deportiva Alajuelense, conjunto con el que jugó Ruiz. El marcador fue 1-3 y los europeos continuaron invictos.

Los alajuelenses en el primer tiempo demostraron buena defensa así como varias opciones a gol. Sin embargo, en el minuto 62 Steve Sidewell se encargó de marcar el primer tanto de los visitantes. La ventaja sólo duró 10 minutos, cuando Allen Guevara estableció el empate después del pase de Kenneth García.

El árbitro Ricardo Cerdas luego señaló penal a favor del club inglés, Berbatov fue el encargado de ejecutarlo y cambiar el marcador a 1-2. Por último fue Bryan Ruiz con un error en la salida de Elías Palma que el nacional aprovechó para anotar el tercer gol para el club londinense, mas no lo celebró en forma de respeto al equipo que lo formó.

La última contienda  fue contra el Deportivo Saprissa que logró empatar al club inglés 2-2. Ambos equipos salieron con propuestas ofensivas y brindaron un buen encuentro.

El jugador del Saprissa David Ramírez anotó el primer gol del partido, no obstante fue Bryan Ruiz quién marcó empate minutos después. Desde ese momento el Fulham mostró más dominio y Rodallega de cabezazo concretó el 1-2.

Los saprissistas mejoraron su juego para el segundo tiempo y Diego Estrada igualó el resultado 2-2. Pese a que los visitantes habían jugado ya dos partidos y faltaban figuras importantes como Dimitar  Berbatov y el portero Maarten Stekelenburg, salieron victoriosos después de ganar por penales 3-5.

Fueron tres partidos llenos de emoción para los aficionados ticos así como para algunos ingleses que también acudieron. Estos encuentros  deberían seguir realizándose ya que nuestros equipos necesitan este tipo de fogueos para mejorar el fútbol nacional.

miércoles, 17 de julio de 2013

Compitiendo bajo la sombra de Lance Armstrong


Lance Armstrong se convirtió en el invitado indeseado del Tour de Francia, regresó para atormentar la celebración del centenario de la carrera de ciclismo más importante del mundo. Esta situación provocó disgusto entre los corredores del pasado y presente, ya que el tema del dopaje fue una vez más el centro de atención.

El ciclismo reúne a muchos aficionados alrededor del mundo, lamentablemente se ha visto perjudicado por los escándalos representados por algunos de sus mejores exponentes. Sin embargo, las acciones de una persona no deben definir la historia y cultura de un deporte.

Previo a la actual edición del Tour, Armstrong ofreció declaraciones que le restaron protagonismo al evento y elevaron las dudas que hay en cuanto a la credibilidad del deporte. Estos hechos causaron disgusto en el mundo del ciclismo, desesperado por probar que ha superado los casos polémicos que lo han caracterizado.

Según el periódico francés Le Monde, el estadounidense afirmó que era “imposible” ganar el Tour sin doparse. Él aclaró que se refería al tiempo en que compitió, como lo dijo en la entrevista con Oprah Winfrey en enero de este año, usar esas sustancias era “parte del trabajo.” Además el ex-corredor aseguró que todavía se considera el poseedor del récord de victorias en el Tour, aunque todos sus siete títulos desde 1999-2005 se los quitaron.

El director del Tour, Christian Prudhomme, sugirió que Armstrong quiere aprovechar la carrera para aumentar su notoriedad.
“Este es un torneo grande, solo miren a su alrededor, hay 2300 periodistas acreditados y cámaras por todo lado. Por lo que si alguien quiere transmitir un mensaje, este es el momento, especialmente porque a la gente le gusta este tipo de comentarios controversiales”, afirmó.

El ciclismo es un deporte que lucha por proyectar una imagen transparente y un futuro brillante, pero mucho del buen trabajo está siendo empañado por los secretos que han salido a la luz gracias a ciclistas involucrados en redes que buscaban mejorar sus capacidades.
La imagen de esta disciplina se ha manchado, sin embargo hay que pasar la página y luchar porque situaciones como las del pasado no se repitan. La cultura del ciclismo tiene que cambiar y debe enseñarle al mundo que sí es posible ganar el evento de forma limpia, contrario a lo que dice Armstrong.

Si por el contrario sus declaraciones son veraces, los encargados de cambiar, ya sean las reglas o el evento, son las autoridades del ciclismo internacional.  Lo que no es correcto es el oportunismo de Armstrong, que con sus comentarios empaña el evento que todos los aficionados esperan cada año, y en particular la celebración de un centenario que tantas emociones y momentos históricos ha brindado.